lunes, 18 de mayo de 2009



EL PARRÓN








Empezó a llover en la fría mañana de San Felipe, la casa ha perdido los colores de antaño, en eso yo corro a fumar un cigarrillo bajo las parras, después de la muerte de mi abuelo estas nunca más volvieron a florecer, después de tantos años parece que nadie quiere recordar más.
No importa, tomaré todas las aves del jardín y volaré a otro nido, ahí donde las presencias han florecido y se han llenado de colores, donde el tabaco no sabe tan distante.

2 comentarios:

  1. Como te irás? a donde volarás??
    esta lindo el cuento... sigue explotando tus virtudes y trata de alejar los defectos..
    nos vemos

    Alicia

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  2. Aún así, bajo esas flores que ya no están, la inmortalidad acaricia cada rincón. Ahí dónde los colores porfían en quedarse y se desvanecen ante las vidas que han pasado ante ellos, permanecen la letras elevados hacia ellos.

    Y más que aves te acompañarán hacia vuestro nuevo nido.

    Saludos y espléndido.

    Un fraterno abrazo

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